En toda profesión o trabajo hay riesgos y uno de ellos es que el trabajador freelance no reciba su pago correspondiente, por lo que debe estar atento para que esto no le suceda. Una cosa que hay que tener en cuenta es que hay clientes que le dicen al freelance que le cancelarán su dinero al culminar el proyecto.
Sin embargo, sobre todo cuando se trata de diseñadores web, sucede que cuando ya llevan el 70% del mismo, el cliente se hace la vista gorda, haciendo que este deje el trabajo y se rehusa a pagarle lo acordado. Contrata otro trabajador al que le miente indicándole que tuvo que contratar sus servicios ya que el anterior no termino el trabajo, justificándose en un abandono del proyecto.
Para evitar estas situaciones, lo mejor es que el sitio sea copiado en un hosting ajeno al del cliente para que cuando esté listo, se le presente de manera que esté conforme y cancele el importe económico correspondiente. Si se trata de una aplicación, el trabajador freelance no está a salvo de ser estafado, por lo que debería hacer lo mismo que si diseña una web.
Ahora bien, si su labor tiene que ver con SEO, es recomendable que cobre por separado cada servicio de optimización de la web para la cual trabaja, algo a concretar posterior a intercambiar links o a la conclusión de la campaña de anuncios.
Si la web ya se encuentra optimizada y lo que se deba realizar es una campaña de link building, el trabajador freelance debe decirle al cliente que cobrara por su trabajo de acuerdo a la cantidad de horas trabajadas. Siempre es bueno cobrar por quincena, ya que así se evita ser estafado de manera superior a lo que se pueda percibir por 15 días laborados.
Si el cliente decide no pagarle al trabajador, entonces es bueno publicar su email y otros datos personales de los que se tengan conocimiento para que otros trabajadores freelance no caigan en la trampa.
